Jardín para Eulàlia, Madrid.

La capa de diseño preexistente en este jardín en Pozuelo de Alarcón empujaba hacia una plantación de ecos orientales, así que optamos por una paleta vegetal que conservara este anclaje de forma sutil, a través de una procedencia botánica oriental común: Abelia x grandiflora, Loropetalum chinense, Ceratostigma willmottianum, Acer palmatum, Nandina domestica (entre las arbustivas) y Anemone x hybrida ‘Honorine Jobert’, Hakonechloa macra, Miscanthus sinensis ‘Yakushima Dwarf’ y Ophiopogon japonicus (entre las vivaces y gramíneas).

Había otro elemento previo, un Prunus cerasifera ‘Pissardii’ en mal estado que tuvimos que talar, que también apuntó una dirección en el diseño de plantación: honramos su cromatismo en púrpura a través de los tres nuevos árboles que hemos plantado, Fraxinus ‘Raywood’ (aquí en un otoño anticipado por el estrés que sufrieron durante la plantación, manifestado mediante una coloración intensa), y con otras especies de tintes profundos, como los Penstemon digitalis ‘Husker Red’, los Pennisetum advena ‘Summer Samba’ y distintas Heucheras. Enlazan bien con los adoquines de granito.

El momento del año en que se construye un jardín influye en los ánimos del paisajista, aquí entregamos un jardín claramente otoñal. Otra de las aportaciones que me ha gustado trabajar aquí es una nueva zonificación en la parcela: abrimos el espacio eliminando un seto muy especial pero que encerraba el jardín en sí mismo, y creamos una nueva estancia bajo la escalera para ocultar cubos, aparatos, mobiliario… La puerta de esta nueva estancia la diseñamos y fabricamos en el mismo acabado oxirón de las escaleras y barandilla de la casa.

Para la creación de este jardín fue imprescindible la ayuda de Planta Paisajistas.